HEBREOS 10: 23-29.

1. ¿A qué se nos exhorta a mantenernos firmes? Heb. 10: 23.

Heb 10:23  Mantengamos firme la profesión de nuestra fe sin fluctuar; que fiel es el que prometió: 

2. ¿Qué incentivo tenemos para mantenernos firmes profesión? —Ib.

3. ¿Por qué debemos considerarnos unos a otros? Versículo 24.

Heb 10:24  Y considerémonos los unos á los otros para provocarnos al amor y á las buenas obras; 

4. ¿Qué no debemos hacer? Versículo 25, primera parte.

Heb 10:25  No dejando nuestra congregación, como algunos tienen por costumbre, mas exhortándonos; y tanto más, cuanto veis que aquel día se acerca. 

5. Mientras estamos firmes y reunidos, ¿Qué debemos hacer? —Ib., última parte.

6. ¿Qué promesa se les da a quienes lo hacen? Mal. 3:16, 17.

Mal 3:16 Entonces los que temen á Jehová hablaron cada uno á su compañero; y Jehová escuchó y oyó, y fué escrito libro de memoria delante de él para los que temen á Jehová, y para los que piensan en su nombre. 

Mal 3:17 Y serán para mí especial tesoro, ha dicho Jehová de los ejércitos, en el día que yo tengo de hacer: y perdonarélos como el hombre que perdona á su hijo que le sirve. 

7. ¿Qué esperanza hay para los que pecan voluntariamente a la plena luz de la verdad? Heb. 10: 26.

Heb 10:26  Porque si pecáremos voluntariamente después de haber recibido el conocimiento de la verdad, ya no queda sacrificio por el pecado. 

8. ¿Qué es lo único que pueden mirar hacia adelante? Verso

27.

Heb 10:27  Sino una horrenda esperanza de juicio, y hervor de fuego que ha de devorar á los adversarios. 

9. ¿Hay alguien en el mundo que no pecado? ROM. 3: 9-12, 23.

Rom 3:9  ¿Qué pues? ¿Somos mejores que ellos? En ninguna manera: porque ya hemos acusado á Judíos y á Gentiles, que todos están debajo de pecado. 

Rom 3:10  Como está escrito: No hay justo, ni aun uno; 

Rom 3:11  No hay quien entienda, no hay quien busque á Dios; 

Rom 3:12  Todos se apartaron, á una fueron hechos inútiles; no hay quien haga lo bueno, no hay ni aun uno: 

Rom 3:23  Por cuanto todos pecaron, y están destituídos de la gloria de Dios; 

10. ¿Han tenido suficiente luz para que no pueden excusarse por sus pecados? Versículo 19.

Rom 3:19  Empero sabemos que todo lo que la ley dice, á los que están en la ley lo dice, para que toda boca se tape, y que todo el mundo se sujete á Dios: 

11. ¿No hay esperanza para nadie que haya pecado? 1 Juan 1: 9; 2: 1, 2.

1Jn 1:9  Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para que nos perdone nuestros pecados, y nos limpie de toda maldad. 

1Jn 2:1  HIJITOS míos, estas cosas os escribo, para que no pequéis; y si alguno hubiere pecado, abogado tenemos para con el Padre, á Jesucristo el justo;

1Jn 2:2  Y él es la propiciación por nuestros pecados: y no solamente por los nuestros, sino también por los de todo el mundo. 

12. ¿Qué dice el apóstol del que ha despreciado la ley de Moisés? Heb. 10: 28.

Heb 10:28  El que menospreciare la ley de Moisés, por el testimonio de dos ó de tres testigos muere sin ninguna misericordia: 

13. ¿Dónde encontramos instrucciones a tal efecto? Deut. 17.2-6.

Deu 17:2  Cuando se hallare entre ti, en alguna de tus ciudades que Jehová tu Dios te da, hombre, ó mujer, que haya hecho mal en ojos de Jehová tu Dios traspasando su pacto, 

Deu 17:3  Que hubiere ido y servido á dioses ajenos, y se hubiere inclinado á ellos, ora al sol, ó á la luna, ó á todo el ejército del cielo, lo cual yo no he mandado; 

Deu 17:4  Y te fuere dado aviso, y, después que oyeres y hubieres indagado bien, la cosa parece de verdad cierta, que tal abominación ha sido hecha en Israel; 

Deu 17:5  Entonces sacarás al hombre ó mujer que hubiere hecho esta mala cosa, á tus puertas, hombre ó mujer, y los apedrearás con piedras, y así morirán. 

Deu 17:6  Por dicho de dos testigos, ó de tres testigos, morirá el que hubiere de morir; no morirá por el dicho de un solo testigo.

14. ¿Qué ejemplo notable tenemos del cumplimiento de esta regla? Num. 15: 32-36.

Núm 15:32  Y estando los hijos de Israel en el desierto, hallaron un hombre que recogía leña en día de sábado. 

Núm 15:33  Y los que le hallaron recogiendo leña trajéronle á Moisés y á Aarón, y á toda la congregación: 

Núm 15:34  Y pusiéronlo en la cárcel, por que no estaba declarado qué le habían de hacer. 

Núm 15:35  Y Jehová dijo á Moisés: Irremisiblemente muera aquel hombre; apedréelo con piedras toda la congregación fuera del campo. 

Núm 15:36  Entonces lo sacó la congregación fuera del campo, y apedreáronlo con piedras, y murió; como Jehová mandó á Moisés. 

15. ¿De qué clase de pecado fue este un ejemplo? Versos 30, 31.

Núm 15:30  Mas la persona que hiciere algo con altiva mano, así el natural como el extranjero, á Jehová injurió; y la tal persona será cortada de en medio de su pueblo. 

Núm 15:31  Por cuanto tuvo en poco la palabra de Jehová, y dió por nulo su mandamiento, enteramente será cortada la tal persona: su iniquidad será sobre ella. 

16. ¿Qué llevó a ese hombre a hacer lo que hizo? Vers. 31, primera parte. Respuesta:  Su acto fue el resultado del desprecio por la ley y el Legislador. Fue un deliberado insulto al Señor; un desafío a su autoridad.

17. ¿Por qué no podía tener perdón? Respuesta —Porque despreció la ley y a su Hacedor, y se separó de la fuente del perdón.

18. ¿Cuál es la naturaleza del pecado deliberado contra que advierte el apóstol? Heb. 10: 29.

Heb 10:29  ¿Cuánto pensáis que será más digno de mayor castigo, el que hollare al Hijo de Dios, y tuviere por inmunda la sangre del testamento, en la cual fué santificado, é hiciere afrenta al Espíritu de gracia? 

19. ¿Cuál es la única esperanza de salvación para los hombres? Hechos 4:12.

Hch 4:12  Y en ningún otro hay salud; porque no hay otro nombre debajo del cielo, dado á los hombres, en que podamos ser salvos.

20. Entonces, ¿cómo puede haber perdón para uno que deliberadamente se aparta de Cristo, despreciándolo con desprecio, y contando su preciosa sangre como una cosa común?

Notas:

«NO renunciando a reunirnos, … sino exhortándonos unos a otros». Aquí es una referencia indudable a las reuniones de la iglesia para

estímulo mutuo. La oración y el encuentro social es un medio de gracia que nadie puede negligenciar excepto por la pérdida de la espiritualidad. Desde que las palabras del apóstol fueron inspiradas por el Santo Espíritu, tenemos aquí un mandato divino de reunirnos para exhortación y oración. El asistir a la reunión de oración y participar en el servicio, es un deber que todo el que se une a la iglesia de Cristo asume sobre sí mismo. El que descuida este deber es infiel a los votos de su iglesia. Puede ser notado aquí, para el estímulo de algunos y para la instrucción de otros, que la mejor exhortación que se puede dar es un testimonio humilde y agradecido de alabanza a Dios por su bondad y de confianza en su misericordia.

Parece evidente, sin embargo, a partir de lo que sigue, que el apóstol tenía más en mente que simplemente la reunión de oración, y que su lenguaje comprende toda la iglesia como un cuerpo de creyentes. La exhortación a no abandonar la reunión de nosotros mismos juntos es realmente una exhortación contra la apostasía. Abandonar la asamblea de nosotros mismos es una señal de indiferencia. Tan cerca está la asamblea de cristianos asociados con la profesión del cristianismo, que aquel que voluntariamente descuida el uno, inevitablemente, renuncia al otro. Los miembros de la iglesia son miembros de un solo cuerpo; y cuando dejan de estar perfectamente unidos como son los miembros del cuerpo humano, cesan de vivir.

«SI pecamos voluntariamente después de haber recibido el conocimiento de la verdad «, etc. Este lenguaje a menudo ha sido gravemente mal aplicado, y ha sido el medio para desanimar a las personas para las que había esperanza. Es un terrible error aplicarlo a aquellos a quienes les hemos estado presentando lo que ven que es la verdad, y a la que asienten, pero que no dan evidencia de la intención de cumplir. No nos corresponde a nosotros juzgar. No podemos saber la naturaleza del suelo en el que ha caído la verdad,

y no podemos decir cuánto tiempo puede tardar en echar raíces y dar fruto. Tampoco debemos decir que no hay esperanza para el cristiano profeso que cae en el error. Nuestro Dios es un Dios que «perdona la iniquidad, y pasa por alto las transgresiones de su heredad»; él retiene no su ira para siempre, porque se deleita en

misericordia «. Miqueas 7: 18.

El versículo vigésimo sexto debe leerse a la luz del verso veintinueve. El pecado del cual el apóstol habla es el pecado de alguien que deliberadamente da la espalda a la asamblea del pueblo de Dios, y no sólo peca, sino que desprecia al Salvador de los pecadores / pisoteándolo y contando su sangre como impía y sin valor. No solo desafía la ley de Dios, sino que rechaza su oferta de perdón. ¿Qué mayor insulto se le puede ofrecer a Dios? Para para alguien así no puede haber esperanza, porque rechaza la única fuente de esperanza.

TENGA EN CUENTA la fuerza del lenguaje del versículo 26, como dirigido a los hebreos, en vista de lo que ha ocurrido antes. / El apóstol ha demostrado que los sacrificios del santuario terrenal nunca han tenido virtud para limpiar del pecado, sino que tipificaban el único sacrificio de Cristo, pero que ahora la sombra ha pasado, ya que Cristo ha sufrido una vez y para siempre. Él es el único sacrificio por el pecado; por tanto, si uno lo rechaza, no hay esperanza.

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